El estadounidense Eric Lu gana el prestigioso concurso Chopin de Polonia
 21 octubre, 2025
Cracovia (Polonia), 21 oct.- El pianista estadounidense Eric Lu ha sido proclamado ganador de la XIX edición del Concurso Internacional de Piano Fryderyk Chopin en Varsovia, en un veredicto anunciado en la madrugada de este martes y tras una larga deliberación del jurado.
Lu, de 27 años, se hizo con la medalla de oro y una dotación de 60.000 euros, el canadiense Kevin Chen consiguió el segundo lugar y 40.000 euros, y la china Zitong Wang obtuvo el tercer puesto, junto con 35.000 euros.
Al conocer el veredicto, un Lu visiblemente emocionado declaró que este galardón «es la realización de un sueño», y recordó cómo, hace diez años, participó por primera vez en el concurso que lleva el nombre de Fryderyk Chopin.
El cuarto puesto alcanzado en esa ocasión le animó a perseverar en su estudio de la obra del compositor polaco, dijo.
El prestigioso concurso, que se celebra sólo una vez cada cinco años, es uno de los eventos de música clásica más importantes del mundo y a la ceremonia de entrega de los premios, que se celebrará este martes, asistirá el presidente de Polonia, Karol Nawrocki.
El proceso de esta edición batió todas las marcas y atrajo la cifra récord de 642 participantes de entre 16 y 30 años de todo el mundo, que se sometieron a un examen de admisión con interpretaciones valoradas por videoconferencia por el jurado.
Finalmente, fueron seleccionados 84 pianistas procedentes de 19 países, con China como el país con mayor representación (28 pianistas), seguido por Japón y Polonia, con 13 concursantes cada uno.
El jurado, compuesto por 17 expertos de reconocido prestigio mundial y ganadores de ediciones anteriores, emitió su veredicto sin caer en las situaciones polémicas que son casi una característica habitual de este concurso.
En 1937, cuando la japonesa Chieko Hara no fue premiada, la audiencia presente en el auditorio organizó un alboroto que sólo fue apaciguado cuando un magnate polaco, Stanisław Meyer, fundó in situ un «premio del público» que concedió en ese instante a la pianista, lo que sofocó la revuelta del público.